Quedaos en la trinchera y luego corred, John Boyne

Título original: Stay Where You Are and Then Leave
Autor: John Boyne
Saga: Autoconclusivo
Editorial: Nube de Tinta
Número de páginas: 254
Precio: 15.95€

El 28 de julio de 1914 Alfie Summerfield cumplía cinco años. Ese mismo día estallaba la Primera Guerra Mundial.
Han pasado cuatro años, y Alfie conoce todos los sinsabores de esta guerra Interminable: vecinos que desaparecen, la tristeza y el cansancio reflejados en el rostro de su madre, los periódicos dando cuenta diaria de los fallecidos en la contienda...; pero, sobre todo, la angustia, la terrible angustia por no tener noticias de su padre. Al principio, llegaban animadas cartas desde el frente que, con el tiempo, fueron volviéndose inquietantemente sombrías y torturadas. Desde hace un año y medio, ni una sola línea.
Por eso el día que Alfie descubra de una forma absolutamente casual dónde está su padre, decidirá ir a buscarlo, cueste lo que cueste...

John Boyne es un autor que tenía muchas ganas de volver a leer. El niño con el pijama de rayas me desgarró el corazón, y aunque solo haya leído ese libro suyo, sentía que escribía de una forma preciosa. Y al acabar Quedaos en la trinchera y luego corred pienso lo mismo. Tiene una forma de escribir que te desgarra el alma.

En esta historia conocemos a Alfie y a su familia y vecinos, y empieza cuando Alfie cumple cinco años. El 28 de julio de 1914, mismo día que estalla la Primera Guerra Mundial. El padre de Alfie debe alistarse para ir a luchar y la vida de Alfie cambia radicalmente en ese momento. Pasa a ser el hombre de la casa, lo que implica dejar de ser un niño. 

Alfie me ha destrozado el corazón. Es una persona muy valiente, que siempre tiene en mente a su padre y cómo ayudar a su madre a que no trabaje y se deslome todos los días y todas las noches las 24 horas del día para poder hacer frente a las facturas; así que Alfie se las ingeniará para poder ayudarla y que la espera del fin de la guerra sea lo más 'amena' posible.

Alfie a lo largo del libro irá conociendo a mucha gente, e irá entendiendo poco a poco de la guerra. En el libro hay un debate sobre ésta, sobre si se debe participar y luchar por tu país o si no es ético y no participar. Son reflexiones muy interesantes que hacen pensar. Pero Alfie tiene una idea clara: quiere saber dónde está su padre. Y un día casualmente lo descubre, y ahí su vida, cuatro años después de que se fuera, volverá a cambiar.

Esta es una historia muy diferente y muy interesante, contada en tercera persona, pero alrededor de la vida de un un niño que, como ya os he dicho, ha tenido que dejar de serlo para convertirse en un hombre. Es una historia contada más allá de la guerra; donde sabemos que hay muerte y destrucción; cuenta el sufrimiento de las familias de los que tuvieron que alistarse, y también de las consecuencias de la guerra una vez acabada. Fuera de ella hay también una guerra que librar y es la de seguir adelante con lo que se tiene y se puede y rezar porque no vayan a picar a tu puerta con las peores noticias que puedan recibir.

Sin duda, Quedaos en la trinchera y luego corred es un libro que merece la pena ser leído, y el autor ha sabido reflejar perfectamente la otra cara de la moneda de la guerra: el sufrimiento de las familias y conocidos de aquellos que tuvieron que alistarse. Es un libro muy, muy corto, se lee en un suspiro. Y totalmente recomendable.

Después de todo, Alfie Summerfield era ahora el hombre de la casa. Y tenía que ganarse el pan.

Agradecimientos a Nube de Tinta por el ejemplar.